Durante los actos fúnebres de los cinco oficiales que fueron asesinados por un tirador en Dallas, Texas la semana pasada, Michelle Obama, esposa del presidente de Estados Unidos protagonizó un incómodo momento junto al ex mandatario George W.Bush.
Durante los canticos que ofreció el coro a los presentes, las autoridades se tomaron de las manos. Michelle quedó al lado de Bush y este de manera muy alegre comenzó a cantar y bailar en pleno escenario. Miraba a la primera dama y se reía, del otro lado su esposa no se veía tan contenta.
Michelle no podía evitar sentirse incómoda por lo que miraba constante a su esposo, el presidente Barack Obama, a quien también se le veía un poco incómodo y trataba de ocultarlo detrás de su particular sonrisa.
El baile de George W.Bush ha sido duramente criticado por diversos medios internacionales, ya que se trataba de un acto fúnebre y no una obra caritativa.
TAN IMBECIL Y CRETINO COMO SIEMPRE BUSH