Aunque Colombia cree haber “terminado” de solventar la crisis migratoria en el departamento de Antioquia, al tomar la determinación de forzar la salida de más de mil cubanos varados en Turbo, una disposición legal, indica otra cosa.
Decenas de cubanos, que aún permanecen en Turbo interpusieron una acción legal, que fue admitida por el Tribunal Administrativo de Antioquia el pasado jueves, para los migrantes en búsqueda de la protección a sus derechos fundamentales y la suspensión de las deportaciones sin el respeto al debido proceso.
Como medida provisional, el Tribunal ordenó que Migración Colombia “garantice el debido proceso administrativo sancionatorio migratorio a cada uno de los tutelantes, siguiendo las pautas establecidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte Internacional de Derechos Humanos”, reseñó El País.
Según Juan Esteban Montoya, el abogado que lleva el caso, “esta medida implica que los migrantes tendrán el derecho a pedir y recibir asesoría legal, incluso de forma gratuita a través de la Defensoría del Pueblo, para garantizar que los extranjeros puedan participar de forma real y efectiva en el procedimiento administrativo de deportación”.
Además, se debe prestar el servicio de traductor para los migrantes que no comprendan el idioma español, en el caso de los haitianos.
Sin salida
En la última semana, salieron de Turbo hacia Capurganá más casi 1.000 cubanos, en busca de continuar su ruta hacia Panamá, a través de la difícil selva del Tapón del Darién.
La salida masiva de los migrantes que llevaban casi tres meses allí se generó tras la advertencia de Colombia de ser deportados a Cuba y la tensa situación en Turbo, a raíz de unos panfletos que circulaban por las calles y que indicaba que quien hospedara a migrantes estaba cometiendo un delito.
Con información de: El País