A pesar de que los pronósticos afirman que el ojo del huracán Irma no tocará territorio cubano, los fuertes vientos de la tormenta podrían afectar severamente varias provincias de la Isla. Algunas ya se encuentran “preparadas”, pero otras, como Bayamo, parecen no tener ni idea de lo que se avecina.
Un reportero del portal CubaNet, recorrió Bayamo donde pudo percatarse de las carencias usuales que sufre la ciudad. Varias farmacias sin medicinas de gran demanda, establecimientos sin puntos de venta, escasez de alimentos, entre otras tantas cosas.
La poca comida que hay se vende casi de inmediato, lo que genera extensa colas en los pocos locales que hay abiertos, mientras Irma se acerca poco a poco..
La venta de gas licuado (GLP) se tornó lenta y aún mantienen un horario rígido a pesar de la solicitud de la defensa civil, para acelerar y extender el horario de los servicios de venta.
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Juan Ariel Zaldívar Reyes cuenta que, para obtener su balita de gas, tuvo que madrugar.
“A las 6 de la mañana ya yo estaba aquí (punto de venta de GLP ‘La Redonda’) y logré comprar a las 5 y 20 de la tarde…, y eso que yo hacia el (turno) 41, porque allí quedaron más de cien personas, e imagino que la mayoría tendrán que volver mañana”.
Otras dificultades detectadas, son la imposibilidad ciudadana para proteger sus propiedades y pertenencias contra vientos fuertes y la lluvia. Según su estado constructivo, más del 50 % de las viviendas del territorio están catalogadas de regulares y malas, y no existen a la venta los materiales, alambres o sogas, para facilitar el anclaje, protección y amarre de techos y el aseguramiento de puertas y ventanas.
Redacción Cubanos por el Mundo / Con información de CubaNet
