Las secuelas del huracán Irma tras su paso en septiembre, aún se hacen agresivas sobre todo en la producción nacional de Cuba. Este mes los cultivos de café, ubicados en Sancti Spíritus sufrieron una baja del 45 por ciento, según medios estatales.
Los trabajadores de los cafetales indican que Irma afectó unas mil 900 hectáreas de café, de las dos mil 200 cultivadas, en la provincia espirituana. Estos detallaron que los sembradíos fueron golpeados por los fuertes vientos y luego aplastados por árboles caídos.
Leosvaldo Cruz Duardo, especialista de café en la Delegación Provincial de Agricultura en Cuba, explicó que uno de los problemas más graves que dejó Irma en los cultivos, “fue haberlos dejado sin sombra cuando estas plantaciones estaban adaptadas a vivir bajo los árboles”.
La variedad de café de calidad exportable, el arábico, ha resultado ser la más afectada. Sin embargo, pese a la gran reducción de la presente campaña, especialista en la materia estima que para la próxima ya se producirá una recuperación.
“El daño que tiene hoy el cultivo no se borra, pero la poda que le realizó el ciclón a la sombra de la variedad robusta puede ser beneficiosa para las campañas posteriores porque cuando hay mayor entrada de radiación solar la planta crece menos, los entrenudos son más cortos, aumenta la fotosíntesis y la aparición es mayor”, señalaron.
Juan Ramón Hernández Rodríguez, uno de los campesinos dedicados al cultivo de café en Sancti Spíritus, contó que el huracán “tumbó mucho grano, tenemos pérdidas, ahí mismo se puede ver que hay muchas matas poniéndose amarillas, se están secando, pero no podemos echarnos a llorar, nos toca apelar a la fuerza de voluntad para recuperarnos, aunque le digo que por aquí hay gente que ha tenido que tomar pastillas, cocimiento de tilo, no es fácil perder el fruto de tu sacrificio”.
La Empresa Agroforestal “Ramón Ponciano”, es la segunda más afectada en la isla. Pues Irma les dañó en gran parte las plantaciones de café arábico. De las 50 toneladas que se estimaron como pérdida, 30 eran de esa especie.
Los expertos creen que una vez que termine la cosecha, buena parte de las plantas acamadas deberán reponerse, y con las otras se deberá proceder a la rehabilitación.
Redacción Cubanos Por el Mundo