Swing tras swing parece incansable. El pelotero cubano de los Medias Rojas, Rusney Castillo, está entregado en cuerpo y alma a convertirse en un jugador definitivo en el beisbol de Grandes Ligas. Él cree que puede y va tras ello. Las cajas de bateo del Babcock Park en Hialeah son testigos de su talento y de su compromiso. Según reseña de El Nuevo Herald.
Cada día durante el invierno, sin mirar el reloj, entrena duro junto a su coach Ricardo Sosa. El pupilo cubano disfrutó de una sólida línea ofensiva de .314/.359/507 con el Pawtucket de Triple A y hace rato que dejó de ser aquel pelotero unidimensional, que perseguía demasiadas bolas fuera de la zona de strike.
“Cada año trato de hacer algo diferente para mejorar. Siempre vengo en el invierno a trabajar con el coach de bateo Ricardo Sosa para ver qué puedo hacer que me permita seguir creciendo. Los peloteros no tenemos descanso”.
Rendimiento y avance
Al consultarle sobre su actuación en la temporada jugando para Triple A, reconoció que fueron resultados satisfactorios, aunque fueron otras variantes las que le impidieron ingresar al equipo “grande”.
“Sí, los números fueron buenos. Si no me llevaron al equipo grande no fue por cuestión de números, sino por otras cosas. Mi único objetivo es controlar mi trabajo, mantener el esfuerzo, que el equipo vea mi ética dentro y fuera del terreno”.
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Ante el reconocimiento y apoyo de personalidades del beisbol como Alex Cora, nuevo dirigente de Boston y el gerente general, Dave Dombrowski, reaccionó con mucha humildad agradeciendo el apoyo.
“No puedo hacer otra cosa que llegar a la primavera en la mejor forma posible. Mucha gente quiere verme en Grandes Ligas, al equipo igual. Mi trabajo ahora es para facilitarles el de ellos en unos meses”.
Listo para triunfar
Su fortaleza está en el terreno, su motivación está intacta, todo parece indicar que en los próximos meses otro cubano dará de qué hablar en el mundo del beisbol. Logros que son la inspiración para todo un pueblo, en el que cientos de niños sueñan despiertos ser un pelotero de Grandes Ligas.
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“No, me presiona para nada. A mí lo que me gusta es estar en el terreno de pelota el mayor tiempo posible. No he perdido la fe de que pronto estaré en los estadios de Grandes Ligas, jugando al máximo de mis habilidades”.
Redacción Cubanos Por El Mundo