Samuel Bravo, participante del colectivo cultural Toromayma, es artista plástico y diseñador gráfico, activista político y comunal, según reseña de Havana Times. Hoy muestra sus más recientes caricaturas sobre la crisis venezolana.
Crisis que ahora no es sólo económica, política y social, sino que también es migratoria. Venezuela se ha convertido en uno de los temas fundamentales de la opinión pública en el mundo. La destrucción de la democracia en el país petrolero es una situación de miedo para otros países.
Ciudadanos en Colombia y Nicaragua, quieren alejarse del socialismo venezolano. Aquí un poco de humor de esa tragedia.
Apoya el trabajo del colectivo cuya finalidad es el apoyo a la organización popular autónoma, mediante herramientas culturales, como el mural, la ilustración, el afiche, la caricatura, el logotipo, el periódico, el cine-club, la música y el rescate de las culturas populares.
“Al igual que miles de mis compatriotas, estoy convencido de que la justicia social no se construye con retórica sino con hechos concretos y que el socialismo es incompatible con la corrupción, la represión y la mentira”.
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Redacción Cubanos por el Mundo
