El pasado 27 de febrero, Raúl Castro anunció mediante decreto presidencial la creación de una institución destinada a ‘preservar el pensamiento y la obra’ de su fallecido hermano Fidel Castro. Los cubanos opinaron sobre la iniciativa, la que ven como un “gasto más” que en nada trascenderá para mejorar su calidad de vida, sino por el contrario, será un mecanismo de adoctrinamiento en el sector educativo.
“¿Se trata de un decreto presidencial o es la voluntad personal de Raúl? Es un tropelaje tremendo porque si la institución va a ser pública, entonces estarán violando su propia ley”, se pregunta Oslenys Escalona, un vecino de La Habana. Según publicación de Diario de Cuba.
Mientras que, Eligio del Río, otro cubano, dice sarcásticamente: “Tratándose del eterno líder supongo que tendrá que ser un edificio de al menos cinco plantas”.
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Una suposición que es manejada por buena parte de la población, acompañada de otras conclusiones construidas a partir de la vivencia acumulada desde hace 60 años bajo un mismo régimen.
“Y por pequeña que sea, la institución deberá tener una plantilla de trabajadores asalariados y todo el recurso y equipamiento técnico que se requiera. Todo eso, de qué bolsillo saldrá”, dice desconfiado Edelmiro Duquernes.
Descaro oficial
Una vecina critica la decisión de crear más instituciones burocráticas, que sólo consumen el presupuesto estatal y no aportan nada a la sociedad, al menos nada que les haga vivir mejor.
“Ya el Gobierno ni siquiera puede garantizar el abastecimiento de íntimas y papel sanitario, sin embargo emplea cuánto dinero le venga en gana para financiar estructuras institucionales que no producen nada que no sea trabajadores ociosos. Hasta después de muerto Fidel [Castro] provoca que se derroche el dinero del pueblo”, señaló la mujer.
Adoctrinamiento
Yamel, estudiante de 12 grado en Marianao, opinó sobre la nueva institución y presumió que se convertirá en el sitio de visita obligado de estudiantes, para las próximas asignaturas que se crearán a partir del mismo.
“Como mínimo, las visitas al lugar que escojan serán obligatorias, parte del componente educativo”, sentenció.
A lo que su compañero Kendrys responde: “A eso ponle cuño, el curso que viene tendremos nueva asignatura: ‘Vida y obra del comandante en jefe’. Ambos estudiantes recordaron las materias que cursan de manera obligatoria: “Cultura Política, Preparación Civil para la Defensa, Trabajo Socialmente Útil y las Evaluaciones Integrales.
“Es un chiste de mal gusto decirle a un cubano a estas alturas que para embutirnos consignas y llamarnos al sacrificio se necesitan decretos presidenciales”, concluyó un vecino sobre el tema.
Redacción Cubanos Por El Mundo
