El Buró Político del Partido Comunista (PCC) aprobó una reforma a la Constitución que ratifica su control absoluto sobre las políticas del país, así como el “carácter irrevocable” del socialismo. Los anuncios fueron hechos a la prensa oficial, tras realizar el V Pleno del Comité Central presidido por Raúl Castro, quien aseguró que en Cuba “la situación es más favorable que hace algunos años”.
La afirmación la hizo a pesar de que el informe presentado señala los resultados “desfavorables” de las políticas públicas en los últimos años, debido a “errores cometidos”, a la “deficiencia de los controles” y a una “visión limitada de los riesgos”. La crisis es justificada también por la ausencia de normas jurídicas adecuadas, por los vacíos informativos, en la falta de cultura tributaria, entre otras causas apuntadas por Granma.
Castro hizo llamado al ahorro, asegurando que “aún persiste una mentalidad derrochadora”, un derroche que seguramente ha constatado entre los miembros de su élite verde olivo, que sí sabe cómo gozar los privilegios del poder, el mismo poder que somete a la pobreza y al sufrimiento a todo un pueblo hace casi 60 años.
“La revolución la obra más hermosa que hemos hecho. Debe prevalecer el espíritu de resistencia y combatividad sin un atisbo de pesimismo y con total confianza en el futuro”, dijo Castro.
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Reforma constitucional
El socialismo es de “carácter irrevocable”, fue la máxima que recoge la propuesta de reforma constitucional aprobada por el Partido Comunista, que ratifica su poder absoluto sobre la política nacional.
“La reforma deberá reflejar las principales transformaciones económicas, políticas y sociales derivadas de los acuerdos aprobados en el VI y VII congresos del Partido y de los objetivos de su Primera Conferencia Nacional”, según Granma.
Tema de Vivienda
El informe presentado precisó que en Cuba existen más de 3.824.000 viviendas, según los datos suministrados por el último Censo de Población efectuado en el 2012 y otras evaluaciones realizadas hasta junio del 2017. Al menos el 39% de las viviendas se encuentran en regular y mal estado.
De acuerdo a la prensa oficial, la proyección para la recuperación del fondo habitacional del país se estima en no menos de diez años, en cuyo período se priorizará a las viviendas en peor estado.
“Para esta tarea se realizarán inversiones en la industria del cemento y se continuará la remodelación de la planta de Siguaney, en Sancti Spíritus, así como la modernización de la planta de cerámica blanca de Holguín, que incrementará de manera sustancial la fabricación de azulejos y muebles sanitarios”, asegura Granma.
Redacción Cubanos Por El Mundo
