Desde el lunes 13 de abril, se decretó en fase de vigilancia epidemiológica reforzada en 63 manzanas de Camagüey, tras la detección del brote de COVID-19, por lo que parte de la estrategia para frenar la propagación de la enfermedad, se basa en la higienización en la que desinfectan calles y áreas comunes.
En este sentido, el plan de desinfección con agua clorada se desarrolla en el asfalto y tierra especialmente en las zonas más transitadas.
Los consejos populares Vigía-Florat y Buenos Aires-Bellavista, (este último con vigilancia reforzada), son las primeras zonas que están siendo higienizadas.
La alarma se encendió luego de la confirmación de diez casos positivos al COVID-19 a inicios de esta semana, en tres consejos populares de la ciudad agramontina: además de los dos mencionados está el de Edén-Juruquey.
El periodista Leandro A. Pérez Pérez publicó varias fotos que muestran un camión cisterna, bajo la escolta de la Policía de Tránsito, echando agua clorada en las principales arterias de la ciudad de Camagüey.
Desinfectan más allá de Camaüey
Además de Camagüey, en La Habana ya se ha implementado varios planes que desinfectan calles, a cargo de carros cisterna del ejército equipadas con agua clorada y jabonosa, para evitar la propagación del COVID-19.
Según voceros del Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (MINFAR), los militares cubanos están prestos en apoyar al Ministerio de Salud Pública (MINSAP) en la batalla contra la COVID-19.
“La orientación es realizar labores de desinfección de las 18:00 a las 22:00 (hora de Cuba), a partir de un programa por zona, para que la acción del cloro perdure en las calles y no sea contrarrestada por el sol y las altas temperaturas ambientales”,
detalló el viceministro primero del MINFAR Álvaro López Miera.
En Santiago de Cuba, también se desplegaron unidades y equipos de bomberos participar en la desinfección con cloro de calles y aceras para enfrentar el COVID-19.
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Para minimizar el riesgo de contagio mediante, el Gobierno busca esterilizar las superficies concurridas como calles, aceras, barandas, portales y escaleras
“A partir de esta primera experiencia, la solución de cloro será esparcida en horas del día cuando la incidencia de los rayos del sol sea menos directa y así lograr un mejor resultado”,
precisó Taiset Fuentes Rojas, vicedirectora de Salud Ambiental del Centro Provincial de Higiene y Epidemiología.
Finalmente, dijo que estas obras se continuará haciendo en la medida en que se confirmen personas que tengan relación con otras también confirmadas, y que pudiera sugerir o propiciar una transmisión autóctona limitada.
