Las arbitrariedades del régimen contra el pueblo no se detienen. Esta vez, un anciano cubano, quien presenta un cuadro de salud complejo, fue multado en Pinar del Río por bajarse el nasobuco para poder hablar mejor, pese a que no habían personas alrededor, detalle el medio independiente CubaNet. Jesús González Álvarez, se encontraba en un parque wifi del poblado Entronque de Herradura, municipio pinareño de Consolación del Sur, cuando fue abordado por agentes de la represora Policía Nacional Revolucionaria por haberse bajado el tapabocas.
El anciano informó que se bajó el nasobuco para poder hablar mejor, pero esto luego de asegurarse de que no había nadie alrededor. Un oficial conocido como capitán Jiménez, lo vio y de inmediato llamó a otro oficial para exigirle le impusiera una multa de 300 pesos cubanos sin siquiera permitirle una explicación.
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González Álvarez, de 60 años, padece de una colitis ulcerativa crónica en el colon, que le provoca hemorragias severas y le ha impedido trabajar el tiempo suficiente como para tener derecho a jubilación. Tampoco recibe pensión pese a que la “revolución socialista y humanista” del fallecido dictador cubano Fidel Castro asegura que “no deja a nadie desamparado”.
En tal sentido, el anciano no tiene como pagar la multa impuesta de forma arbitraria por bajarse el nasobuco, medida que parece absurda, pues el castrismo permite aglomeraciones de personas en diferentes puntos del país.
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El pasado mes de septiembre el régimen de La Habana reconoció que hasta el 19 de ese mes la policía había impuesto en el país un total de 10 mil 487 multas por “incumplimiento de normas de bioseguridad”. A esto hay que agregarle que muchos cubanos no cuentan con el dinero para pagar los montos impuestos de forma arbitraria.
Redacción Cubanos por el Mundo
