El periodista uruguayo residente en Cuba, Fernando Ravsberg, es el claro ejemplo de cómo actúa el llamado “síndrome de Estocolmo” en las personas. Ravsberg, es un reconocido comunicador, que sirvió como corresponsal de la BBC en la isla durante años y a través de su difunto blog en Internet, Cartas desde Cuba, ofrecía opiniones que picaban en lo más profundo del comunismo cubano, hasta que los medios oficiales y la Seguridad del Estado lograron callar su importante voz.
Pero ahora la posición de Fernando Ravsberg es totalmente diferente, al parecer para ganarse algún tipo de terreno dentro del nuevo mundo político que se está formando en la Cuba comunista. A través de su cuenta en Facebook, el periodista, como si se tratarse de un vocero castrista, se han encargado de desprestigiar la huelga de hambre de Luis Manuel Otero Alcántara, haciendo uso de la información difundida por el aparato de propaganda del régimen, mismo sistema que lo llevó a ser enterrado mediáticamente.
El primer post de Fernando Ravsberg sobre la huelga de hambre de Otero Alcántara fue el comunicado que la Dirección Provincial de Salud de La Habana, emitió en hora de la mañana del domingo, donde se informa sobre el ingreso del activista al hospital Calixto García y de que sería tratado.
Obediente y sin refutar ningún detalle, el uruguayo simplemente sirvió de replicador de aquella mentira, y hasta podrían ser tomadas de forma irónica sus palabras: “Qué bueno que está bien de salud a pesar de la huelga de hambre y sed que lleva desde hace muchos días”.
Los post siguieron, uno quizás más indignante que otros para quienes siguen y se preocupan por la salud de Luis Manuel Otero Alcántara, quien tomó la vía de la huelga de hambre como único recurso ante los atropellos que la dictadura comete en su contra.
“Cuando vi en el hospital a Alcántara no pude evitar pensar en las diferencias con la imagen de Mella en su huelga de hambre”. El uruguayo se refiere a Julio Antonio Mella, un comunista cubano y fundador del Partido Comunista de Cuba (PCC) que llevó a cabo una huelga de hambre en 1925 luego de ser enviado a prisión por sus ideales izquierdista. Mella llevó su huelga de hambre hasta las últimas consecuencias, logrando doblegar al sistema, quién en ese momento le concedió su libertad.
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“Este sujeto no luce como Julio Antonio Mella, parafraseando a Fernando Ravsberg”, comenta una ciberclaria seguidora del uruguayo sobre el video que difundió el aparato de propaganda sobre Otero Alcántara.
Para el periodista, las huelgas de hambre de los disidentes en Cuba se han convertido en una “comedia”, echando por tierra los esfuerzos de los cubanos que sueñan con vivir en un país libre de comunismo y lleno de libertad.
“La historia se repite, primero es un drama y después una comedia. Las huelgas de hambre del disidente Fariñas lo pusieron al borde de la muerte”.
Es así como Fernando Ravsberg, quien en su momento incomodó al castrismo con sus palabras de seda, pues pintaba la verdad de Cuba de una forma difícil de ocultar, hoy es un peón más de quienes se valen de la mentira y la manipulación para acabar con la reputación de un joven que lo único que ha hecho es hacer valer sus derechos.
Redacción Cubanos por el Mundo
