El declive de la COVID-19 en Cuba no se debe, como lo intentan vender las autoridades castristas, a las medidas de prevención a los inventos vacunales, sino a la costosa inmunidad por infección, costosa porque durante ese proceso cobró la vida de miles de cubanos.
El científico cubano Amílcar Pérez así lo indicó. En una publicación en su cuenta de Facebook el experto desmontó la propaganda comunista informando que el declive en el número de casos no es por las labores del régimen comunista, sino todo lo contrario.
“Así como es incorrecto sentenciar que las vacunas cubanas para COVID-19 no sirven, lo es asociar exclusivamente a la vacunación la caída de los casos diarios en Cuba, descartando el efecto de la inmunidad por infección que —tristemente— tuvo/tiene una contribución significativa”, dijo
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El experto mostró gráficas de varios países donde sufrieron olas fuertes por las variantes de la COVID-19, especialmente la DELTA, y como se inició un descenso “sostenido”. Aclaró que ello responde a que “aquí está también el efecto de la peligrosa inmunidad por infección”.
El mandamás cubano Miguel Díaz-Canel, aseguró recientemente que el descenso en los casos de la COVID-19 se debió a los inventos de vacunas cubanas. Los nuevos casos descenderían por debajo de los mil y el sábado llegaron a menos de 700.
“Nuestros científicos con sus vacunas han contribuido a salvar al país. Es evidente el resultado que está teniendo la campaña de inmunización y la efectividad de las vacunas, que comenzaron a aplicarse en condiciones muy difíciles, con una alta circulación de la cepa Delta”, dijo Díaz-Canel.
Sin embargo, los retrovirales cubanos no han sido comprobados por ninguna de las organizaciones internacionales responsables en la materia de salud e incluso han advertido los riesgos de vacunarse con ellos.
Según las autoridades cubanas las vacunas Abdala y Soberana 02 tienen una eficiencia de 92,2 % y 91,2 % respectivamente. La información y ensayos clínicos de estos fármacos no han sido compartidos con organismos internacionales.
Redacción Cubanos por el Mundo