A través de su cuenta de Facebook, Juliette Isabel Fernández Estrada, esposa del activista cubano, Boriz González, denunció el desabastecimiento de las almohadillas sanitarias en las farmacias de La Habana.
“El Estado no ha vendido ni uno de los exiguos paquetes de íntimas (almohadillas sanitarias, pero seguiré diciéndoles íntimas como todas las cubanas) que tenemos derecho a comprar en las farmacias, a razón de diez íntimas al mes por mujer entre 10 y 55 años de edad”.
Expresó Juliette.
Expuso en la publicación que “las menstruaciones de enero y febrero el Estado las echó al saco sin fondo de nuestra pobreza, que no es solo menstrual”.
Dijo que desconoce si en las tiendas en moneda nacional venden almohadillas sanitarias porque nunca se ha tropezado con estas en esos centros comerciales. Reclamó: “así las mujeres cubanas seguimos trabajando, cumpliendo, yendo a la escuela, militando en la inútil FMC” y que “deberíamos pararlo todo mientras no sepamos qué pasará cuando usemos la última íntima del paquete”.
Lamentó que su hija adolescente tenga que pasar las mismas penurias que vivieron ella y su madre en los años noventa por culpa del régimen castrista.
“El año 2020 fue como el 1993 de mi adolescencia, por nuestras edades y tantas similitudes más. Durante la pandemia tuve que zancajear La Habana, virtual y físicamente, hasta parar en lo más profundo de Guanabacoa para conseguir íntimas para mi hija”, explicó.
Lee también: En Cienfuegos no hay almohadillas sanitarias desde octubre
Dijo, además, que no iba a permitir que su hija viviera 27 años después, lo que ella vivió, al tener que usar durante la menstruación paños viejos lavados o medias blancas deportivas en desuso.
Afirmó: “No tener íntimas que proveerle a mi hija me mueve una rabia especial. Pero así y todo es una rabia pequeña y encapsulada en medio de un mar de injusticias, un drama ínfimo al lado de otras pobrezas y atropellos”
Redacción Cubanos por el Mundo