El profesor cubano Leo Fernández Otaño, anunció recientemente y a través de sus redes sociales que renunciaba a su categoría como docente en solidaridad con los presos políticos, especialmente con quienes salieron a marchar pacíficamente el histórico día del 11J.
Esta decisión llegó luego de las injustas sentencias que impuso recientemente la dictadura castrista a varios de los enjuiciados, y entre los cuales se encuentran varios menores de edad.
“Yo Leonardo Manuel Fernández Otaño, ciudadano cubano, laico, católico e historiador, renuncio de modo público en gesto de solidaridad con los presos políticos y en consonancia con mi opción preferencial por los más pobres: a mi categoría docente”,
escribió el profesor cubano.
Aunque el mismo Fernández Otaño reconoció que esta determinación cerrará seguramente las puertas a trabajar en “espacios oficiales”, afirmó contundentemente que nunca será cómplice de un sistema que encierra injustamente a unas personas que solo quieren vivir libremente.
“Renunció a lo más querido y con ello a toda posibilidad de docencia en los espacios oficiales, pero seguiré con la frente en alto porque nunca seré cómplice de este crimen, de este teatro político de mal gusto”.
Asimismo, el profesor cubano recalcó haber él mismo un manifestante del 11J, situación que lo lleva aún más a no callar ante esta ola de injusticias desatada por el castrismo en cada rincón del territorio.
“No puedo callar ante la injusticia, ningún intelectual comprometido con la realidad puede virar el rostro. Girar la cara ante esta abominación nos convierte en seres sin alma y vacíos. Recordar a esos que callan o que están encerrados en la soberbia, que mañana pueden ser sus hijos los encarcelados, que mañana pueden ser sus hijos los emigrados”.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
