Dos antillanas que se convirtieron en madres recientemente denunciaron desde Las Tunas que sufrieron violencia obstétrica por parte de médicos y enfermeras del Hospital General Docente Dr. Ernesto Guevara de la Serna.
En una publicación del portal castrista Periódico 26, las féminas relataron las vicisitudes que pasaron durante sus partos, un momento que debía ser especial y se convirtió en una total pesadilla.
Yanelis, de 25 años, relató que rompió aguas sentada en su casa, y que al llegar al hospital lo que menos se imaginaba es que tendría que estar sola en un momento tan complejo como lo es dar a luz.
“Después de reconocerme y hacerme cuatro o cinco tactos, pasé más de 24 horas en una cama, penando. Las contracciones eran fuertes, pero inestables, me orinaba del dolor y nadie venía a verme. Cuando empecé a llamar gente, el médico más viejo me trató como si fuera una niña que debía castigar”
detalló esta cubana que sufrió violencia obstétrica
No fue hasta el día siguiente, a las 11:12 de la mañana, cuando Yanelis logró dar a luz. No obstante, debido al proceso tardío, el bebé estuvo mucho tiempo en el canal de parto, padeció sufrimiento fetal y defecó dentro del vientre materno, por lo cual madre e hijo tuvieron que tomar antibióticos para evitar más complicaciones.
“Pensé que iba a morir y que no lograría tener a mi bebé. No te puedo contar cuántos ‘torniquetes’ me hicieron sin decirme una palabra. No voy a olvidarme nunca de la indolencia del personal que me atendió”
recalcó
Por la negligencia del personal médico en la mal llamada “potencia médica”, el recién nacido también sufrió una disminución de oxígeno en la sangre, provocándole una hemiparesia y no se descartan otras patologías a mediano plazo.
Cubana denunció que hasta un médico se le subió a la barriga
Otro caso de violencia obstétrica fue denunciado por “Leidis”, de 29 años, quien relató que al entrar al área de parto la enfermera la miró mal, porque estaba en la entrega de turno y parecía como si la embarazada le molestara.
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Destacó, además, que le dieron una bata rota y llena de manchas, y cuando los dolores subieron de intensidad, no pudo evitar quejarse.
“El médico se colocó frente a mí y dijo en voz alta: ‘¿Siempre gritas así para todo? Gozaste, ahora te toca sufrir. Aquí aguanta, porque tú quieres tener un hijo, nadie te obligó y parir duele, ¿no te lo explicaron?’. Habló más, pero por vergüenza no lo repito. A mí se me caía la cara de la humillación y le respondí que me estaba maltratando”
subrayó
La joven madre, que logró llegar a casa con su bebé sana, aseguró que sigue indignada por la falta de ética y empatía del personal médico.
“Uno se me subió en la barriga, y yo, histérica. Fue difícil, me desgarré a lo grande. Pero más que el sufrimiento, tengo grabado el discurso del doctor”, expresó esta antillana víctima de violencia obstétrica.
En la “potencia médica” abundan casos de violencia obstétrica
El médico cubano Yunier Egnodio Leyva reconoció que Cuba está retrasada años luz de los partos en el resto del mundo.
“Me afecta cuando veo a las puérperas asustadas, indefensas, tiradas en una cama, con una tardía recuperación. Lo óptimo es insertar a la familia y permitir el acompañamiento a la mamá en todos los momentos del embarazo, así va con mayor seguridad y el resultado es satisfactorio”
explicó
El médico reconoció que el salón del Hospital General Docente Dr. Ernesto Guevara de la Serna no tiene confort ni privacidad. No obstante, ello no justifica la violencia obstétrica que constantemente ejecutan los doctores en la mal llamada “potencia médica”.
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Redacción Cubanos por el Mundo
