Luego de enviar a Cuba un donativo de ropa infantil, una familia española tuvo que lamentar que no fuera entregado el paquete a su destino.
La denuncia fue enviada a Cubanos por el Mundo en el afán de alertar a otros para que no envíen paquetería a la Isla.
El señor que realizó este donativo es un español que está casado con una cubana y con ella tienen dos hijos.
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— Cubanos por el Mundo (@Cubanoselmundo) November 29, 2022
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Relata que en España son una familia que, como muchas, padece la crisis económica, pero que pese a la austeridad quisieron ayudar a unos amigos cubanos.
“El caso es que de tanto en tanto sí que hemos caído en la tentación de enviar paquetes a Cuba por tratar de aplacar un poco las miserias más tristes que suceden en ese país”, dijo.
El señor confesó que su envío les aportaría felicidad a los destinatarios, y al mismo tiempo ellos también experimentarían esa satisfacción por ayudar.
El donativo de ropa infantil no llegó supuestamente porque los destinatarios no estaban en casa
El paquete contenía ropita de niño y de niña. Era “para dos pequeños hijos de amistades de la infancia de mi mujer”, dijo el afectado por este robo.
La sorpresa fue tremenda cuando recibieron en su domicilio de España una devolución que en su interior tendría, presuntamente, el contenido intacto.
Pero no fue así y era de esperar, pues Cuba alegó que los aproximadamente 3 kilos de ropa no llegaron a destino supuestamente por no estar en casa el destinatario.
“Nos devuelven a España de momento un paquete lleno de papel mojado y botes de insecticidas”, y envía dos fotos que corroboran aquello.
La familia cubanoespañola está indignada por lo sucedido pues es una vergüenza total lo que les han regresado.
“Los paquetes se enviaron en cajas bien precintadas por los encargados de correos España y ahora veréis como llegan”, concluye el mensaje enviado a nuestra redacción.
Esto es usual en la Cuba socialista, donde se pierden contenedores, maletas y los donativos que hacen las organizaciones son desviados para vender en tiendas de la llamada moneda libremente convertible (MLC).
En Cuba es tal la desvergüenza y la corrupción en todos los niveles, que no hay certeza ni seguridad alguna de que una persona reciba, así sea un lápiz o un botón, sin que haya algún tipo de “cambalache”.
Influencers como Alexander Otaola han promovido, en reiteradas ocasiones, un parón en las ayudas a la Isla, que oxigenan a la dictadura.
Este lunes, durante una conversación con exiliados cubanos en Suiza, Otaola pidió buscar mecanismos directos para ayudar a nuestras familias en la Isla.
“Hay que buscar la manera de ayudar sin que ese dinero, ayuda o donación no pase por manos de la dictadura, tenemos que exigirlo como comunidad internacional, como cubanos”, aseveró.
Redacción Cubanos por el Mundo