Como es conocido, en la Cuba comunista, el Estado es el único empleador, por lo que los trabajadores por cuenta propia se preguntan a dónde van los fondos que deben pagar mensualmente a la Seguridad Social.
Es de suponer que el Estado corre con la responsabilidad de garantizar las pensiones y subsidios de los trabajadores y vacaciones remuneradas.
Según un análisis que realiza Diario de Cuba sobre un artículo publicado recientemente por el periódico oficialista Granma, el mal manejo de la economía por parte del régimen se evidencia cuando algún trabajador se enferma o accidenta en un período menor a seis meses no recibe ningún tipo de subsidio.
Las declaraciones la viceministra primera del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), Marta Elena Feitó Cabrera sobre el tema son:
“Cuando el MTSS desarrolló estudios acerca de la protección a corto plazo en el sector cuentapropista, determinó que no era el momento de proteger a los trabajadores ante el riesgo de enfermedades a corto plazo. Solo a largo plazo, con certificados médicos de más de seis meses de duración”
Curiosamente, para los trabajadores estatales no existe tal cobro estricto del Seguro Social, mientras que a los trabajadores por cuenta propia deben pagarlo mensualmente, con excepción de los jubilados y personas mayores de 65 años.
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Cita DDC al periódico Granma en agosto del 2015 por una denuncia formulada por un hombre de la ciudad de Bayamo.
El cuentapropista, sufrió un infarto cerebral que lo dejó inhabilitado para seguir trabajando.
A pesar de que había pagado puntualmente sus mensualidades al Seguro Social, la respuesta del Estad fue retirarle el carnet de cuentapropista y a su vez darle de baja por la Oficina Nacional de Administración Tributaria (ONAT) como contribuyente.
El trato excluyente al que se enfrentan los trabajadores por cuenta propia -lo que en países libres se le conoce como propiedad privada y/o emprendedores- el desinterés por instaurar un mercado mayorista donde puedan adquirir los productos necesarios, no permitirles que reflejen la totalidad de sus gastos en las Declaraciones Juradas de Ingresos Personales es un escenario ideal para los movimientos de los cuentapropistas o consejos comunales organizados por el régimen, que arremete constantemente en su contra, dedicándose, en su lugar, a cobrarles el impuesto puntualmente.
Redacción de Cubanos por el Mundo | Con información de Diario de Cuba