Si algo aqueja a las instituciones de salud en la depauperada isla, son precisamente los constantes robos y la falta de mantenimiento de la infraestructura de estos centros que cuentan con varios años de construcción.
Recientemente, tuvo lugar el robo de siete televisores en el Hospital Ginecobstétrico Ramón González Coro, así como un aparente cortocircuito que terminó por dejar a oscuras un laboratorio.
Según informó un trabajador que pidió mantenerse en el anonimato, estos robos se producen constantemente en este centro ubicado en la calle 21 entre 4 y 6, en el Vedado.
En tanto, la falta de asignaciones presupuestarias también afectan a estos centros de salud cubanos que cada día ven empeorar sus condiciones para ofrecer un servicio digno y de calidad a los pacientes que acuden diariamente al lugar.
Un médico del González Coro que también quiso mantenerse en el anonimato, comentó:
No se puede dejar nada encima de la mesa, todo se lo llevan, incluso equipos que deben ser difíciles de vender, como otoscopios, y cuya falta significa un verdadero problema para el servicio que prestamos
En tanto, el supuesto cortocircuito en el laboratorio que ocasionó incendio en el sistema eléctrico, según versiones de trabajadores en el lugar, dejó a oscuras la instalación, en consecuencia, este miércoles por la mañana, el laboratorio seguía sin poder atender a los pacientes.
Unas usuarias dijeron:
No están haciendo nada, todo está a oscuras y no tienen noticia de cuándo podrán recuperar el servicio
Y una señora que se encontraba en el lugar afirmó:
A mí me han dado un papelito con teléfono y extensiones, y me han dicho que me mantenga llamando
Este centro de salud, pasó a ser uno de los más importantes de La Habana, tras el deterioro del Hospital América Arias (Maternidad de Línea), aun en un dilatado proceso de restauración y sin fecha de entrega cierta y precisa.
Según afirma el portal de noticias Martí Noticias, tras la caída del comunismo soviético se profundizó el deterioro. Hospitales derruidos, enfermeras con pinta de agentes policiales y especialistas médicos ausentes. En tanto, el régimen de Raúl Castro trata de mantener a flote el estos centros de salud que hacen aguas por todas partes.
Redacción CPEM | Con información de diariodecuba
