La hispana de más longeva de Estados Unidos y la persona de más edad en el estado de la Florida cumplió 112 años y “casi no tiene arrugas”. Ella afirma que tienen el secreto para la longevidad: “estar con Dios”.
“Cuando yo era joven conocí a muchas viejitas a las que no les cabía una arruga más. El secreto está en aplicarse aceite de oliva en la cara en las mañanas y noches. Yo me mantengo alentadita siempre. Aunque en la voz se le nota a uno lo viejo”, dijo entre risas la cumpleañera.
Se trata de Isabel Castaño de Lugo una colombiana, un tanto vanidosa y muy lúcida que aún mantiene en su memoria el acento paisa y los dichos con los que creció en Manizales, según reporta El Nuevo Herald.
“Cualquiera no cumple 112 años. ¿Cierto que casi no tengo arrugas?”, expresó Castaño mientras celebraba su natalicio en el ancianato Plaza Health Network, en Miami.
Historia
Castaño nació en Marulanda un pueblo en la región de Caldas y creció en la ciudad de Manizales. Dejó Colombia hace 50 años cuando su esposo un judío que llegó a Colombia huyendo de la II Guerra Mundial, decidió emigrar a Washington en 1970 junto con sus dos hijos.
“Fuimos de las primeras generaciones que llegaron a este país, cuando había pocos hispanos. Llegamos a Washington, donde el español era casi desconocido”, dijo su hijo Danilo Lugo, quien cuidó de su madre hasta que tuvo 107 años.
Castaño llegó hace 26 años llegó a Miami y cuenta muy divertidamente que se casó cuando tenía 43 años porque se dedicó a cuidar de sus padres.
“Todos los hombres eran unos borrachos y sinvergüenzas. Y como no me casaba, casi me quedo solterona”.
Redacción Cubanos por el Mundo
