Cuba es más una inmensa prisión que un país “soberano” como dice el régimen, y las acciones de sus agentes así lo indican. La Seguridad del Estado impidió la salida de Yriade Hernández Aguilera, miembro del consejo coordinador de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) quien pretendía viajar a Estados Unidos para visitar a su esposa e hija.
Según informó a Diario de Cuba, Carlos Amel Oliva, líder juvenil de la organización, los agentes le indicaron a Hernández que él estaba “regulado” y por lo tanto su viaje no podía ser.
“Su esposa y su hija viven en EEUU. Él se dirigía a visitarlas y le prohibieron viajar. Solo le dijeron que estaba regulado, que no podía salir”
El activista pretende imponer un reclamo en inmigración, aunque no espera que trascienda mucho.
Los hechos
Hernández Aguilera explicó que iba a reunirse con su esposa y su niña en Miami. La pequeña cumple nueve años el próximo 18 de febrero y pretendía acompañarla en la celebración.
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En el aeropuerto oficiales del servicio de Inmigración, después de varias llamadas a distinto nivel, le dijeron que estaba supervisado por la Seguridad del Estado y que para dejarlo pasar debían autorizarlo, lo cual no hicieron.
“Se ve de manifiesto la mentira que dice el régimen constantemente”, dijo, en referencia a informaciones recientes en varios medios de difusión que —según el activista— aseguran que “Cuba está abierta a la reunificación familiar y que EEUU trata de obstaculizar este proceso”.
“Cuba continúa siendo una gran prisión. Desde 1959 y hasta la fecha el régimen continúa impidiendo la entrada o salida del territorio nacional a quienes estimen conveniente, sin razón, de forma arbitraria”, denunció.
Hernández Aguilera ha representado a la UNPACU en varios eventos fuera de la Isla. Fue uno de los opositores que estuvo presente en el Teatro Artime, de Miami, durante el pronunciamiento del presidente de EEUU, Donald Trump, en torno a la política hacia La Habana.
Redacción Cubanos por el Mundo
