Una mascota inusual se apoderó de los corazones de los habitantes de La Habana. Se trata de un Pelícano que hace seis años dejó su hábitat natural a consecuencia de una herida que le generó un anzuelo de pesca.
Desde ese momento, Freddy De León y su familia lo adoptaron como su mascota y lo entrenaron para que aprendiera a vivir entre los humanos y el tránsito de la calle 23 del barrio Vedado de la ciudad. Fue tan bien entrenado que se levantaba y se sentaba cuando su dueño se lo indicaba, reseña el portal web Local10.
Le puso de nombre Pancho y con su alegría se convirtió en la mascota preferida de la Isla y de todos los turistas que pudieron contemplarla y disfrutar de su gran pico, su largo y elegante cuello y su plumaje marrón.
Hoy, De León cuenta con una gran tristeza que Pancho murió atropellado por un automóvil:
No hay forma de expresarlo… Nada lo reemplazará
El pájaro más popular y querido por De Léon y si familia se ha ido, ya no estará alegrándolos con su plumaje, ni acariciándolos con su gran pico.
No habrá un habanero que no lo extrañe al pasar por la calle principal de la Isla, la calle 23.
La vida de Pancho
Vea aquí una reseña audiovisual grabada en el años 2013, sobre la vida de Pancho en La Habana, contada por quien también fue su cuidadora, Magela Guerrero.
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Redacción Cubanos por el Mundo
