Yudania Monés Linares, hija de Gladys Linares, cubana defensora de los derechos humanos que escribe para medios independientes, compareció el pasado 5 de abril en la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería (DIIE), luego de ser amenazada con una multa de 500 pesos sí no acudía a la citación oficial. En la reunión, el oficial “Salvador” la instó a persuadir a su madre a dejar de escribir “mentiras” que de cualquier forma “dejará de escribir”.
“Por más espeluznante que resulte la amenaza implícita en esa enigmática frase, el mensaje no fue inesperado, pues en meses recientes otros periodistas independientes han sufrido coacción mediante mujeres de su familia”, explica Linares en Cubanet.
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Entre los periodistas acosados por el régimen Linares mencionó los casos de José Antonio Fornaris y Augusto César San Martín, cuyas esposas, Amarilis Reyes y Yanela Durán, fueron citadas y amenazadas por los agentes de la Seguridad del Estado.
Deuda de gratitud
El oficial que entrevistó a la hija de Linares, aseguró tener una “deuda de gratitud” hacía su difunto padre quien perteneció a la Seguridad del Estado. El funcionario se refirió al “intento infructuoso por denigrar la memoria de su padre” atribuido a la labor de Linares y su crítica al régimen ante medios en Internet.
“Muy pronto su inequívoco sentido del honor le obligó a sumarse a la oposición cubana para enfrentar públicamente a esta dictadura totalitaria, pues comprendió que nunca podría estar del lado de los que abusan y reprimen, ni servir a un régimen que aterroriza a sus ciudadanos como a rehenes”, sostiene la escritora.
Que deje de escribir
“Salvador” le comunicó a Monés la necesidad de que su madre dejara de escribir sus artículos cargados de “mentiras” en contra del régimen.
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“El oficial de la ‘Gestapo’ cubana quería tratar con mi hija una mal disimulada intimidación contra mí, y aunque le aseguró que ellos no pretenden “hacernos más daño”, ella debía disuadirme de seguir escribiendo, pues según dijo, mis artículos, parcial o totalmente cargados de mentiras, a ellos los perjudican mientras que a mí no me benefician”, cuenta Linares.
La frase que más impactó a la madre e hija fue aquella sobre el futuro de su labor, al decir que “de todos modos “dejaría de escribir”, dejando ver que la citación sólo se trataba de una advertencia ante la amenaza implícita. Linares, junto a decenas de disidentes, están hoy bajo el terror de las Gestapo cubana, más vigente que nunca en la dictadura de los castro en Cuba.
Redacción Cubanos Por El Mundo
