Un reportaje publicado por la cadena CNN, ha despertado un escándalo de acoso sexual que rodea al actor estadounidense Morgan Freeman. Ocho mujeres relacionadas a la industria del cine aseguran haber recibido un comportamiento “inadecuado” del ganador del Oscar como mejor actor.
Según reseña EFE, Freeman emitió un comunicado en el que expresa sus palabras de disculpas a quienes se hayan sentido “incómodos” por algún comportamiento de su parte.
“Cualquiera que me conoce o que ha trabajado conmigo sabe que no soy alguien que ofenda intencionadamente o haga sentirse mal a los demás a propósito. Pido disculpas a quienquiera que se haya sentido incómodo o crea que le haya faltado al respecto”. Dice el comunicado.
Casos
Una joven quien trabajó como asistente de producción en el verano de 2015 como parte del personal de la comedia Going In Style, cuya película fue protagonizada por Freeman, Michael Caine y Alan Arkin, asegura que lo que había pensado como uno de sus trabajos soñados, se convirtió en meses de acoso por parte del actor.
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En sus declaraciones, cuenta que el Freeman a parte de haberla tocado inadecuadamente, también le hacía comentarios sobre su cuerpo o su vestimenta, y que incluso en varias oportunidades trató de levantarle la falda mientras le preguntaba si llevaba ropa interior.
Arkin le pidió que parara y Freeman se sorprendió, sin saber cómo reaccionar, según el relato de la mujer.
Lo ocurrido llevó a la joven a abandonar la industria del cine. “Eran comentarios constantes sobre mi aspecto”, señaló la mujer, que a menudo volvía a casa entre lágrimas.
Otra de las mujeres que se prestó para develar el supuesto acoso del actor en los lugares de grabación de las películas, sostiene que:
“Sabíamos que si iba a estar por allí no debíamos llevar prendas que mostraran nuestros pechos, nuestros traseros. No debíamos llevar nada ajustado”, indicó.
Tres mujeres más del mundo periodístico de entretenimiento aseguraron que Morgan Freeman les hizo comentarios inapropiados durante la atención que recibían días antes de los estrenos de las películas.
Ocho mujeres en total denunciaron el trato de Freeman como acoso sexual o, al menos, comportamiento indebido, ya sea a la hora de promover sus películas, en el plató e incluso en su productora, Revelations Entertainment.
Las supuestas víctimas de abuso del actor aseguraron que nunca hicieron públicas sus quejas por miedo a perder sus puestos de trabajo.
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Redacción Cubanos por el Mundo