El presentador del noticiero de la televisión cubana, Rafael Serrano, decidió dedicar unas cortas palabras a un reportaje sobre los médicos esclavos, indicando que su reacción es la misma que tiene “todo nuestro pueblo”.
“Algo bello, puro amor realmente”, comenzó Serrano con sus palabras, propias del discurso comunista que por un lado profetiza “amor y paz” mientras que por el otro represión, hambre y miseria.
“¿Quién no se emociona, a quién no se le salta una lágrima, verdad? Esa es Cuba. ¡Así somos los cubanos! Orgullosos de sentirnos así y de haber hecho lo que hemos hecho”, afirmó el presentador.
Pide disculpas a los televidentes por la “emoción” que siente al ver a los médicos esclavos, pero por supuesto sin mencionar los problemas que existen en las misiones internacionales, las deserciones o las condiciones de trabajo a las que son sometidos los especialistas.
“¡Ejemplo para el mundo! Gracias, por favor me disculpan pero es parte de la misma reacción que estamos observando y que la tiene todo nuestro pueblo”.
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Pero Rafael Serrano parece no estar en sintonía con el pueblo de Cuba. Y es que a los cubanos no les emociona el ver a los médicos esclavos saliendo o llegando de misión. Les emociona poder encontrar, luego de hacer horas de cola, pollo, carne de cerdo, arroz o “algo” para comer.
Les emociona que en sus casas llegue el agua, por lo menos dos veces a la semana. Les emociona que todos los días puedan abrir los ojos sin que sus casas se les vengan encima.
Al pueblo de Cuba le emociona la idea de poder tener un sistema de gobierno diferente, donde las libertades estén garantizadas, donde la economía funcione de forma correcta y la represión solo sea un recuerdo triste de una dictadura fracasada.
Redacción Cubanos por el Mundo