¡Todavía hay gente sin corriente! La tormenta tropical Laura que apenas y rozó Cuba, afortunadamente no dejó grandes daños a la infraestructura y tampoco ninguna pérdida humana en el país, sin embargo las lluvias registradas en la isla tras el paso del fenómeno natural, mantienen a varias localidades sin el servicio eléctrico.
Alrededor de 62.725 clientes quedaron sin corriente con el leve roce que tuvo Laura sobre Cuba, sin embargo, funcionarios castristas aseguran que trabajan “arduamente” para que el servicio sea restablecido lo más pronto posible.
Entre tanto, los daños más severos se registraron en Santiago de Cuba, Guantánamo, Pinar del Río, Artemisa, Isla de Juventud y Matanzas, siendo las montañas de Guantánamos y Santiago de Cuba, las localidades donde será más difícil restablecer la electricidad, así como en zonas rurales de La Habana.
El daño a los servicios eléctricos son justificados cuando hay serias devastaciones provocadas por el gran impacto de una tormenta o un huracán, en el caso de Cuba, es el colmo que Laura apenas rozó la isla y aún cuando ya el fenómeno se alejó a otras tierras, todavía hay gente sin corriente.
Laura, con solo unas fuertes precipitaciones dejó a Pinar del Río con el 92% de los usuarios sin corriente, Matanzas 47%, Isla de la Juventud 36%, mientras que trabajadores de la empresa eléctrica trabajan en las zonas con mayor afectación para restablecer el servicio eléctrico.
Pinar del Río, la provincia más afectada con el paso de Laura, comenzó el pasado martes los trabajos en pro de la recuperación de la electricidad, según los medios del régimen hay hasta la fecha 90 equipos de trabajo de los cuales 50 están especializados en la reparación de líneas, que se encuentran en las calles restableciendo el servicio.
El servicio eléctrico en Cuba que ya era deficiente por la falta de inversión y mantenimiento, quedó seriamente afectado con el paso de la tormenta tropical, Laura afortunadamente apenas rozó la isla. Si el comportamiento del fenómeno natural hubiera sido como lo fue en lugares como República Dominicana, Haití o Puerto Rico, probablemente todo el país estuviera a oscuras y sin la esperanza de volver a ver luz, por lo menos a corto plazo.
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Redacción Cubanos por el Mundo
