La crisis migratoria cubana continúa acrecentándose aún con el coronavirus azotando al mundo entero. De acuerdo con el más reciente informe de la Comisión Nacional de Refugiados (Comar), en lo que va de 2020, cuatro mil 174 cubanos se encuentran en México solicitando refugio, impulsados por la debacle económica de su país producto de más de 60 años de comunismo.
Si bien México mantiene sus fronteras cerradas con los países centroamericanos, los antillanos siguen llegando a la frontera Sur, con la esperanza de que se les conceda refugio, ya que ingresar de manera ilegal para tratar de alcanzar Estados Unidos no es viable, pues desde 2016, el Gobierno mexicano y el estadounidense, mantienen un acuerdo de deportación para todos aquellos migrantes que ingresen de forma indebida al territorio.
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El informe de COMAR destaca que Cuba es el tercer país de América que más refugiados empuja a México, solo detrás de Honduras y Haití. Luego de la derogación de la Política Pies Secos/Pies Mojados, los cubanos intensificaron su viaje por el continente para llegar a la frontera Sur de Estados Unidos y de esa manera solicitar asilo político.
Las razones que impulsan a los cubanos a esta peligrosa travesía son muchas. En Cuba, la economía esta devastada por las malas políticas aplicadas por el castrismo, quien se atrinchera en su discurso del embargo para tratar de excusarse de las malas decisiones tomadas. La represión policial, que creció con la llegada del nuevo régimen de Miguel Díaz-Canel, es otro de los elementos que obligan a los cubanos a abandonar su patria.
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Pero la más crítica de todas es las pocas, por no decir nulas, posibilidades que tienen los cubanos de surgir o estabilizarse en su propio país. La calidad de vida de los cubanos es igual o incluso peor que en la de países declarados en “pobreza” como Haití o varios del continente africano. Un trabajador cubano gana entre 25 a 45 dólares mensuales, mientras que la economía interna poco a poco se acerca más a una dolarización. La falta de viviendas dignas, de servicios básicos y de condiciones de vida adecuadas, forma parte del legado de Fidel Castro a Cuba.
Desde que la Revolución llegó en 1959, los cubanos no han parado de abandonar el país y todo apunta a que dicha migración masiva continuará.
Redacción Cubanos por el Mundo
