Fue liberada la activista cubana Keilylli de la Mora después de estar 10 meses encarcelada en la ciudad de Cienfuegos injustamente.
La opositora explicó el proceso de su liberación a través de una directa en la página de Facebook del líder de la Unpacu, José Daniel Ferrer
Cabe mencionar que Keilylli de la Mora fue condenada en el año 2020 a un año y seis meses de prisión por los supuestos delitos, impuestos por el castrismo de “propagación de epidemias”, “desacato”, “atentado” y “desobediencia”.
Tras su puesta en libertad, la activista contó que el día de ayer, la segunda jefa de mando le dijo que le iban a dar un turno en el hospital y la montaron en un carro, donde ya tenían sus pertenencias, sin ella saber. Posteriormente la trasladaron a otro vehículo y la llevaron a una casa en Rancho Luna, donde estaba su esposo. En ese lugar, le dijeron que su liberación había sido por parte del régimen y no por quienes lucharon para sacarla.
Sin embargo, la activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), Keilylli de la Mora, manifestó que está amenazada para trabajar limpiando pisos en un hospital, pero ella no quiere hacerlo porque representa un riesgo para su salud, por la covid-19, por ese motivo considera que la medida tal vez fue con el propósito de perjudicarla.
Keilylli de la Mora relató algunos acontecimientos importantes desde que estuvo en prisión.
Contó que desde que fue encarcelada, entró en huelga de hambre, durante esos días los demás presos le comían los alimentos que le llevaba su papá, pero manifestó que no le importaba.
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La activista en varias oportunidades trató de quitarse la vida, porque prefería morir que seguir encarcelada sufriendo por el desprecio de otras mujeres presas que le gritaban insultos.
Contó que la última vez que decidió suicidarse fue en el pasado mes de enero y lo hizo porque estaba cansada del maltrato por parte de los guardias y por la falta de comunicación en la que la tenían, pero su familia no se enteró.
En esa oportunidad se enterró una aguja y la llevaron al hospital de emergencia. Contó que posteriormente la tuvieron aislada durante 20 días.
La activista Keilylli de la Mora, también contó que durante el tiempo de su prisión, detuvieron a su esposo, entraron arbitrariamente a su casa y se lo llevaron, con la excusa de una ayuda que había recibido. En ese mismo momento también le quitaron el celular de la opositora.
La activista manifestó que no le extraña que en cualquier momento los esbirros del régimen toquen su puerta para llevársela nuevamente, puesto que en Cuba cualquier excusa es suficiente para encarcelar a todo aquel que esté en contra de la dictadura.
Cabe destacar que activistas cubanos dentro y fuera de la isla, en varias oportunidades exigieron la liberación de Keilylli de la Mora y de los demás presos políticos de la isla cárcel.
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Redacción Cubanos por el Mundo
