Los cubanos que habían sido víctimas de la supuesta Organización No Gubernamental (ONG) que ayudaba a migrantes en Uruguay pero que terminaba secuestrándolos en viviendas bajo precarias condiciones, recibieron estatus de refugiados en ese país, logrando regularizar con ello su entrada, según informó la fiscal a cargo del caso.
La prensa local reporta que así como los migrantes, entre ellos cubanos, que contactaron a la fiscalía para denunciar lo que estaba ocurriendo, quienes fueron víctimas de la organización y aún no lo han reportado, pueden hacerlo.
La investigación de las autoridades de Uruguay desnudó el esquema de tráfico humano utilizado por la ficticia ONG que engañaba a los migrantes cubanos y luego retenía en casas designadas para cobrarles por estancia diaria. Eran abordados en la terminal de ómnibus de Montevideo, donde les ofrecían movilización evitando los puntos de control.
Según indicó la fiscal Stella Alciaturi, fue el 1 de junio cuando cuatro migrantes dieron el grito de auxilio que, en medio de la Operación Zunzún, logró dar con ellos para liberarlos. No especifica cómo lograron contactarlos. Tras este hallazgo, la fiscalía logró recibir otras llamadas de otros migrantes que estaban retenidos en otra casa de la organización criminal.

Los migrantes cubanos eran abordados en la terminal con la promesa de llevarlos por otras vías, sin ser vistos por las autoridades. Este viaje oscilaba entre los 500 y 1500 dólares, para movilizarlos a distintos puntos del Uruguay. Ese conductor era quien ofrecía contactar a la “ONG” para que en caso de no poder costearse el viaje, recibieran ayuda de hospedaje. Al estar en el sitio, les decían que debían cancelar entre 5 y 100 dólares por día para permanecer alojados o en cambio, serían denunciados ante las autoridades por su estatus irregular.
Además de la pareja de 55 y 63 años detenida al momento de la liberación de los migrantes cubanos, una tercera persona en Uruguay resultó también capturada.
Redacción Cubanos por el Mundo