Manifestarse en contra del régimen castrista en la isla, convierte al cubano en víctima automáticas de la represión; por tal motivo una cubana hizo una llamada a la policía para pedir los permisos de protestar y así evitar detenciones arbitrarias o agresiones.
En la llamada, la mujer indicó que el viernes 23 de julio organizarían una manifestación pacífica en el parque central de Santo Domingo, de la provincia de Villa Clara, en la que exigirían libertad para Cuba, que Díaz-Canel salga del poder, derechos humanos, entre otros temas que aquejan al pueblo cubano.
“Nos estamos rigiendo por el artículo 54 de la constitución, que nos da estos derechos. Queríamos saber si ustedes van a apoyarnos, no nos van a dar palo y golpes; queríamos estar seguros”,
dijo la mujer a la policía en la llamada.
Luego que la joven hizo la solicitud, el represor al teléfono le preguntó su nombre, edad y donde residía, a lo que ella respondía: “Liseth García de 28 años, resido en Santo Domingo”.
Segundos después a la joven le cortaron la llamada, por lo que volvió a intentar y se identificó nuevamente y ratificó su pregunta sobre si podía manifestarse pacíficamente sin ser víctima de la represión, a lo que el oficial se negó a responder, argumentando que no tienen información al respecto.
Una y otra vez, la policía le preguntó el nombre a la mujer, por lo que ella preguntó porque era tan importante su nombre y dirección, que si acaso iban a buscarla para detenerla antes de manifestarse pacíficamente.
“No puede manifestarse”, dijo el policía en un tono amenazante antes de cortar nuevamente la llamada.
La persona que contestó posteriormente, aseguró que no sabía de que manifestación estaban hablando, por lo que la mujer volvió a explicar lo que harían y este agente del castrismo volvió a preguntar su nombre y que quién se creía para manifestar en contra del régimen, además de faltarle el respeto con improperios.
Finalmente, la mujer alzando el tono de voz le dijo que tenía el derecho a manifestarse e incluso invitó a la policía a hacerlo, ya que como ciudadanos están pasando la misma necesidad, sumergidos entre el hambre y la miseria como el resto del pueblo.
Redacción de Cubanos por el Mundo