El reconocido chef Massimo Bottura, dueño de uno de los dos mejores restaurantes del mundo, la Osteria Francescana, en Italia, se chupó los dedos con los pastelitos de guayaba y queso originarios de la gastronomía cubana y que ahora se disfrutan en Miami. Según reseña del Miami Herald.
“Esto”, dijo el chef, tocando la caja de pasteles, “mantiene viva una tradición. Puedes mejorarlos. Puedes verlos de una manera diferente. Pero para mantener viva la tradición, hay que mirar el pasado de manera crítica y sacar lo mejor del pasado al futuro”, sentenció.
One of the world's best chefs @massimobottura came to Miami. We made him try pastelitos. Full video: https://t.co/a2vPWzMfwT pic.twitter.com/nWKiGZKnMc
— Miami Herald Food (@MiamiHeraldFood) January 29, 2018
Típicos en la cocina cubana, los pastelitos de guayaba y queso cautivaron el paladar del importante embajador culinario, que llegó, para una corta visita, a Miami. El periodista Carlos Frías le dio la bienvenida con una selección de platos locales, entre los cuales se destacaron las piezas criollas.
“En el momento en que abrí la caja de pasteles de Vicky Bakery, comenzó a hacer sonidos, ‘Ooh, ooh, ooh’ (…) moviendo los dedos sobre ellos, preguntándose por dónde empezar. Comenzó cogiendo una pieza de cada artículo y probándolo. Un trozo de croqueta de jamón. Otro de papa rellena (…) Sus cejas se levantaron al sabor de un pastelito de guayaba y queso. Y después de un gran mordisco terminó por chuparse los dedos” contó Frías.
Libro en Miami
El chef llegó a Miami para promocionar su nuevo libro Bread Is Gold, durante dos noches, donde se unió a la cocina al chef local, José Mendín, para preparar un menú de 650 dólares por persona.
“Se puede decir mucho sobre una cultura al observar su comida más básica. Cuando digo que una papa (rellena) puede ser mejor que la trufa, lo digo en serio. Busco el sabor crujiente. La proporción entre la papa y la carne y luego el sabor: eso es lo que queda en tu paladar”, dijo Bottura al periodista especializado en temas culinarios, mientras probaba la comida.
Redacción Cubanos Por El Mundo