Por Mario Hechavarria Driggs, periodista independiente.
Un grupo de jóvenes adventistas de la República de Angola repartieron alimentos y mensajes cristianos entre los capitalinos que se encontraban en la mañana del lunes en el parque Fé del Valle de Centro Habana.
Los muchachos, estudiantes de la Escuela Internacional de Medicina ofrecieron lo que traían en sus mochilas, teniendo en cuenta a los más necesitados. La población agradeció este gesto y con extrañeza preguntaba por qué lo hacían. Ellos respondieron que compartir con el prójimo era un mandato bíblico.
La policía se acercó al lugar pero al conocer que eran jóvenes extranjeros y estudiantes en Cuba, se mantuvieron de lejos pidiendo instrucciones por sus equipos.
La iglesia Adventista del Séptimo Día surgió en los Estados Unidos en el año 1863. Uno de sus fundadores fue la señora Ellen G. White, cuya extensa obra sigue siendo respetada y estudiada. Esta iglesia es conocida por su énfasis en la alimentación y la salud, además por el respeto a la libertad religiosa.
En Cuba los adventistas tienen limitada su misión evangelizadora. Todas sus propiedades fueron confiscadas al triunfar la revolución. Las escuelas, periódicos, revistas, emisoras de radio, etc. Pasaron a manos de un estado que proclamó como método de enseñanza la doctrina marxista leninista, con el objetivo de para crear el llamado ¨Hombre Nuevo¨, además de presentar a la religión como ¨el opio de los pueblos¨.
Por esta razón y por cumplir con el séptimo día (sábado) muchos adventistas fueron expulsados de sus centros de trabajos y estudios. Incluso algunos sufrieron prisión por predicar el evangelio junto a cristianos de diferentes iglesias.