(Diario de Cuba).- La artista Tania Bruguera ha lanzado una campaña de recaudación de fondos para abrir este 2016 en La Habana el Instituto de Artivismo Hannah Arendt (INSTAR), un proyecto que tiene como fin la creación de herramientas pacíficas para implementar cambios de política en la Isla y una alfabetización cívica.
De acuerdo con declaraciones de la autora de la conocida performance El susurro de Tatlin en el video promocional del proyecto, la idea viene precisamente de los sucesos acontecidos después de su intento escénico en la Plaza de la Revolución.
En aquel momento las fuerzas del régimen se lo impidieron. Bruguera fue detenida en varias ocasiones, golpeada y su pasaporte confiscado durante ocho meses. Fue acusada de alterar el orden público, cargos que finalmente fueron sobreseídos.
Desde el Instituto de Artivismo Hannah Arendt (INSTAR), con la participación de artistas y activistas de todo el mundo que podrán colaborar con los cubanos, se trabajará en la creación de herramientas pacíficas para implementar cambios de políticas y una alfabetización cívica a través del arte.
“El instituto de arte y activismo que estoy abriendo en La Habana surgió al comprender que mucha de la violencia que existe en el mundo se genera a partir del miedo como respuesta a las cosas que no sabes que puedes manejar, que no ves de manera clara”, señala Tania Bruguera en el lanzamiento de la campaña de recaudación de fondos.
“Creo que una campaña de alfabetización cívica y la cultura ayudarán a las personas a entender cómo enfrentar sus miedos para que el miedo se transforme y tenga un desenlace pacífico y creativo”, señala.
En tal sentido, Bruguera defiende que “para poder entender lo que pasa a nuestro alrededor se necesita tener las herramientas; el arte no es solo una herramienta para el cambio social que funciona de forma conceptual, sino también de forma tangible, humana, a partir de la cual las personas pueden tener fe en que las cosas pueden ser diferentes porque ellos así lo quieren y porque van a intentar cambiarlas”.
La artista destaca la importancia de que el Instituto estará enclavado en La Habana, y sobre todo en La Habana Vieja, “un lugar donde muchas visiones diferentes sobre Cuba coinciden”.
“Tienes a los extranjeros que vienen como turistas con la proyección del país que quieren ver, junto a los cubanos desempleados o con unos salarios muy bajos, por eso La Habana Vieja es lugar perfecto donde todas las fricciones que estamos viviendo en la transición por la que estamos pasando se realizan y se visibilizan”, acotó.
Para Pablo Helguera, Director de Programas Académicos y para Adultos del Departamento de Educación del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMa), el apoyo a proyectos como el que lleva adelante la artista cubana es muy relevante.
“Apoyo a Tania Bruguera por su integridad y por la forma en que ella concibe el arte, no como una reflexión sobre la vida sino como una manera directa de actuar”, señala.
“Este Instituto busca la reflexión y el debate pero también la realización de ideas que lleven a un cambio. Es en esta integración del compromiso político, que está en todo lo que hacemos, lo que hace este proyecto digno de apoyo. Espero que ustedes lo apoyen también”, reflexiona Helguera en el vídeo de la campaña de recaudación de fondos.
De acuerdo con Tania Bruguera, el Instituto tiene la masa crítica para empezar.
“Serán amas de casa, serán estudiantes, trabajadores, todos, serán los cubanos de a pie. Lo que necesitamos para lanzar este proyecto es el apoyo de la mayor cantidad de personas posibles, así sea un dólar, como una manera de demostrarle al Gobierno cubano que hay muchas personas en el mundo y en Cuba que quieren ver realizado el proyecto”.
La artista invita a todos a participar del cambio político a través de la cultura. “Si crees en el poder del arte, la educación y la libertad de expresión, únete a nosotros para crear el instituto para el arte, el activismo y la alfabetización cívica”, argumenta.
Los fondos recibidos en la campaña serán destinados a labores del proyecto para “adquirir equipamiento básico (como ordenadores portátiles, software, proyectores, disco duro y una impresora) para el instituto con sede en Cuba”, y explica que se tratará del 25% de la meta de la recogida, es decir, unos 25.000 dólares.
“Los eventos incluirán talleres, conferencias y grupos de trabajo con artistas internacionales, activistas, economistas y políticos”, revela el texto de la convocatoria. Igualmente prevén “pagar los sueldos para el coordinador del proyecto”, con un 60% de lo recaudado; así como destinar un 12% de los honorarios para los suministros de modo general.
“Ellos (el Gobierno) quieren mantener a los cubanos en silencio, pero con este proyecto esperamos dar a todos los que están interesados, los conocimientos y herramientas para el cambio pacífico”, concluye la artista.