Tres muertos es el saldo que dejó el conflicto por un perro en la ciudad de Port St. Lucie, del condado de Santa Lucía, en el estado de Florida.
Ken Mascera, sheriff del condado de St Lucie, al hablar de la llamada notificando el suceso, dijo:
“Si escuchabas esa llamada por la radio, se te erizaría el pelo en el cuello: una niña pequeña dice ‘hay alguien disparando en nuestra casa, creo que mis padres están muertos, creo que mi familia está muerta.”
Entre las víctimas se encuentra una adolescente de 13 años de edad, un hombre adulto y el sospechoso, de quien se desconoce si se suicidó o fue abatido por los efectivos policiales.
Según las autoridades policiales de Port St. Lucie, el sospechoso y las víctimas eran vecinos. Habían asistido en la mañana del lunes a la Corte, por un conflicto por un perro considerado como “peligroso”.
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“Todos llegaron a casa del tribunal, y luego el sospechoso se armó y fue a la casa de la víctima”, dijo Mascera.
Los efectivos policiales se presentaron en el lugar del acontecimiento, cerca del mediodía, después de recibir el llamado. Al llegar, hallaron a un hombre adulto muerto y a la adolescente gravemente herida, falleciendo luego en el hospital.
Intercambio de disparos
El sospecho se retiró de la casa de las víctimas, y se produjo un enfrentamiento con los efectivos policiales, de aproximadamente dos horas.
El Jefe asistente Richard del Toro, informó que, en el intercambio de disparos producido, uno de los oficiales resultó herido:
“Los oficiales encontraron al sospechoso que estaba dentro de la residencia de la víctima. Intercambiaron disparos con el sospechoso. Uno de nuestros oficiales resultó herido”.
Al ingresar el grupo SWAT a la vivienda del sospecho, lo encontraron muerto. Aún se desconocen las condiciones del fallecimiento.
“Es impactante y trágico” … “No es característico de este vecindario o de la ciudad, pero haremos todo lo posible para descubrir todas las razones”.
Jefe Richard del Toro
Charles D’Agata, vecino de la zona, dijo haber escuchado los disparos, pero pensó que eran fuegos artificiales, porque nunca algo así había sucedido en su vecindario. Agregó,
“Nada como esto ha sucedido en los últimos 20 años. Es un gran vecindario. Es algo muy loco lo que sucedió por alguien que se emociona por un perro”.
Redacción Cubanos por el Mundo
