Desde la sede del Movimiento San Isidro, a través de un comunicado por las redes sociales la opositora Anamely Ramos, acusó al régimen cubano del asedió impuesto hacia los activistas, quienes pacíficamente desarrollaron un programa para exigir la libertad de su compañero de lucha Denis Solís.
“Desde la sede del Movimiento San Isidro, acusamos al Estado Cubano y a los Órganos de la Seguridad del Estado del asedio constante e invasivo que nos ha impuesto desde que llegamos aquí, pacíficamente, el lunes 15 de noviembre de 2020”.
Anamely Ramos, resaltó que ella ni sus compañeros han cometido algún tipo de delito para merecer el trato que la Seguridad del Estado ha tenido contra ellos.
Cabe resaltar, que los esbirros del régimen presuntamente intentaron envenenar a los activista quienes permanecen atrincherados en huelga de hambre y sed, según Anamely estos echaron acido al agua de la cisterna.
Así mismo, aseveró que han restringido el acceso a la cuadra y hasta han detenido a familiares que iban a verlos, entre esos a la mamá de la periodista Iliana Hernández.
Las razones de la huelga de hambre y sed del movimiento San Isidro
La activista cubana Anamely Ramos, aclaró que la razón por la cual entraron en huelgas de hambre y huelga de hambre y sed, se debe a que la persona que le suministraba la comida fue interceptada por esbirros del régimen, quienes la privaron de todos los alimentos.
“Interceptaron a la vecina que nos traía el miércoles nuestros suministros de comida y aseo. Esa fue la razón del comienzo de las huelgas de hambre y de hambre y sed”.
Ramos, enfatizó que las autoridades de Cuba, fueron quienes los han arrojado a la huelga de hambre, pues al contar lo que dejaron de comida se percataron que no alcanzaba para todos.
“Ellos nos han arrojado a la huelga de hambre. Esa decisión fue también una medida de sobrevivencia para Omara Ruiz Urquiola”.
Por último, Anamely Ramos, responsabilizó al régimen cubano de lo que les pueda pasar de ahora en adelante a los integrantes del Movimiento San Isidro resguardados en su sede en La Habana Vieja.
Según la información suministrada por esta activista, desde hoy ella y sus compañeros empiezan a debilitar físicamente.
“También pido a la Unión Europea que se interese y se pronuncie sobre la injusticia profunda que se ha cometido contra Denis Solís y sobre la crisis humanitaria que estamos viviendo en San Isidro en estos momentos”.
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Redacción de Cubanos por el Mundo.
