El deporte lamentó la pérdida reciente del balonmanista cubano Alfredo Quintana, nacionalizado portugués y ante la inesperada muerte, fue inevitable recordar el caso de otro cubano, Vladimir Rivero, quien en 2004 se despidiera de las canchas, en el momento más prometedor de su carrera.
El diario español As, especializado en deportes, comparó las pérdidas trágicas para el deporte de los cubanos Alfredo Quintana y Vladimir Rivero. Quintana pereció el pasado viernes luego de un paro cardiorrespiratorio mientras entrenaba para su selección, FC Porto. Por su parte Rivero, quien jugaba para San Antonio, falleció por una aneurisma en la aorta en su residencia en Barañain, España.
Ambos cubanos fallecieron en la treintena de sus vidas y habían abandonado la isla buscando futuro, esperanza y trayectoria. También coinciden en la disciplina del balonmano y en la decisión de aceptar la nueva nacionalidad del país que los acogía. Salieron por un sueño, lo alcanzaron, pero inesperadamente lo abandonaron, iluminando la vida de miles en su paso.
Aunque Alfredo Quintana si logró representar a Portugal, Rivero con su pasaporte húngaro no llegó. Sí se le recuerda como un deportista de nivel, quizás de los mejores balonmanistas de entonces, participando ganando una Liga, dos Copas Asobal, una Supercopa de España y una Recopa de Europa.
Por su parte el diario español Marca, lo define cómo si se tratara de un “trágico guion que compartía unas malditas coincidencias”, siendo ambos cubanos, porteros profesionalizados, nacionalizados y fallecidos superando escasamente los treinta años. Ambos en su “plenitud deportiva”.
Los cubanos marcaron a sus compañeros de equipos, a sus selecciones y a la fanaticada. En definitiva, a los amantes del deporte. La más reciente, la partida de Alfredo Quintana, provocó gran cantidad de manifestaciones de afecto, respaldo y solidaridad a quien consideran será “eterno”, quedando inmortalizado su paso por el FC Porto con el retiro de su camiseta de la plantilla. El 1 seguirá siendo de Quintana.
Redacción Cubanos por el Mundo
