Ya han pasado más de tres semanas desde que el líder opositor Félix Navarro se declarara en huelga de hambre, con el fin de exigir una libertad que nunca debió perder. Durante ese tiempo, la salud del activista se ha deteriorado de manera alarmante, según reportan varios de sus allegados.
Es pertinente recordar que Félix Navarro se encuentra en huelga de hambre desde el pasado 23 de agosto, una decisión que mantendrá hasta que el régimen retire los supuestos delitos de lo que es acusado.
Su hija, Saylí Navarro, ha denunciado en varias ocasiones, y a través de disintos medios, que la salud de su padre está corriendo grave peligro. “No sabemos si está vivo o lo han dejado morir”, dijo a principios del mes de septiembre.
Sin embargo, hace un par de días, trascendió la noticia de que el obispo de Matanzas, Monseñor Manuel Hilario de Céspedes, visitó al líder del Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel en la prisión de Combinado del sur, en Matanzas. El religioso informó en su momento que Navarro pesaba alrededor de 60 kilógramos.
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Asimismo, el obispo de Matanzas recalcó que Félix Navarro está más decidido que nunca a cumplir su palabra: mantener la huelga de hambre hasta que se haga justicia.
Apoyo a Félix Navarro
El héroe de la Primavera Negra ha recibido numerosos mensajes de apoyo de distintas figuras opositoras al régimen, tanto de Cuba como del exterior. Entre ellos, por ejemplo, Marco Rubio y Mario Díaz-Balart, quienes condenaron el encarcelamiento del opositor y responsabilizaron al régimen cubano de lo que le pudiera pasar mientras permanece secuestrado.
Por otro lado, varios activistas y opositores cubanos decidieron llevar a cabo un ayuno diario en solidaridad tanto con Félix Navarro, como con otros líderes opositores detenidos, entre ellos José Daniel Ferrer.
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Redacción de Cubanos por el Mundo