La activista cubana y miembro de las Damas de Blanco, Saylí Navarro, ofreció detalles del reciente juicio falso que comenzó a llevarse a cabo tanto en su contra, como del resto de manifestantes del 11J en Matanzas, incluyendo a su padre, Félix Navarro.
En una llamada telefónica que sostuvo con el activista Ángel Moya Acosta, Navarro señaló que el juicio, que quedó concluso para sentencia, podría finalizar el 22 o 23 de febrero.
Saylí Navarro relató que, durante el juicio, su papá intentó denunciar varias situaciones con respecto a un esbirro de la Seguridad del Estado. Sin embargo, las autoridades castristas lo atajaron y le dijeron que eso “no tenía nada que ver”.
“Mi papá le dice a ellos, en la declaración, que en algún momento después de la agresión que él sufrió por parte del oficial ‘Yuniel’, él tomó unas piedras en sus manos, pero que en ningún momento, él las lanzó”,
relató la activista.
Asimismo, Saylí Navarro dio a conocer que, la fiscal encargada del caso, desde el primer momento que tomó la palabra, “arremetió con mucha fuerza” contra los acusados, dando por hechos los cargos de los que se le acusa a las víctimas, y mencionando especialmente a Félix Navarro, y a ella misma.
La mujer también señaló que uno de los testigos de la Fiscalía declaró que Félix Navarro, a quien tildaron de “cabecilla” de las manifestaciones durante el juicio, quería supuestamente “penetrar la sede del Gobierno Municipal”.
“Ellos tienen imágenes de ahí, precisamente de frente al Gobierno Municipal, y donde se ve en todo momento a mi padre, y a quien les habla, que en ningún momento nosotros no tocamos siquiera tocamos la acera del Poder Popular, estuvimos todo el tiempo en la calle”.
Tribunal militarizado
Navarro también dio la información de que, en la sala del juicio, estuvieron presente los nueve acusados, y por cada uno de ellos, un familiar. A partir de ahí, todos eran militares o agentes represores vestidos de civil.
La opositora aseveró que la presencia de los militares se debe a las intenciones de la dictadura en seguir sembrando terror a la población.
En el mismo orden de ideas, trascendió que el resto de los familiares y/o acompañantes de los acusados, tuvieron que quedarse en un parque próximo al Tribunal.
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Redacción de Cubanos por el Mundo