El alcalde de Nueva York, Eric Adams, declaró este viernes el estado de emergencia por la llegada de más de 17 mil migrantes en los últimos meses, muchos de ellos enviados en autobuses por las autoridades de Texas.
Tras el anuncio, el alcalde demócrata explicó que la ciudad espera gastar este año al menos mil millones de dólares para ayudar a estas personas. A su vez, manifestó que los albergues están prácticamente llenos, por lo que pidió ayuda urgente al gobierno federal y reclamó un plan coordinado para trasladar a migrantes a otras localidades del país.
New York City is being forced to bear far more than its fair share of a national crisis caused by political motivations. Join me at City Hall to talk about asylum seekers. https://t.co/55IkEkDghE
— Mayor Eric Adams (@NYCMayor) October 7, 2022
Desde el pasado abril más de 17 mil demandantes de asilo, en su mayoría sudamericanos, han sido enviados en autobuses a Nueva York desde la frontera sur de Estados Unidos.
TE PODRÍA INTERESAR: Estados Unidos: “Estamos con los pueblos de Cuba, Nicaragua y Venezuela en su lucha por reclamar sus derechos”
Adams asegura que Nueva York está en “situación de crisis” por llegada de migrantes
Según la agencias de noticias EFE, Adams comentó que actualmente el sistema de refugios alberga a 61 mil personas y uno de cada cinco es un inmigrante.
“Estamos en una situación de crisis, la ciudad tiene ahora más de 61.000 personas en nuestro sistema de refugios. Esto incluye miles de neoyorquinos sin hogar y miles de personas que buscan asilo que nos han enviado en los últimos meses de otras partes del país (…) Cada día el número de personas crece y cada día a partir de ahora fijará un nuevo récord”, indicó.
“Esta es una crisis humanitaria que empezó con violencia e inestabilidad en Sudamérica y que se está acelerando por las dinámicas políticas estadounidenses“, denunció el alcalde de Nueva York ante los envíos de migrantes que están organizando el gobernador de Texas, Gregg Abbott.
Abbott y otros gobernadores republicanos han tenido que enviar migrantes a Nueva York, Washington (específicamente en las afueras de la residencia de Kamala Harris) y otras ciudades controladas por demócratas, ello para repartir la carga migratoria que poseen como estados fronterizos y protestar contra las políticas de Joe Biden.
Nueva York es una de las pocas ciudades en Estados Unidos que tiene la obligación de dar cobijo a cualquier persona y no dejar a nadie en la calle.
Redacción Cubanos por el Mundo
