El aparato represivo del régimen sigue haciendo de las suyas en Cuba, y volvió quedar demostrado cuando esbirros le prohibieron a la activista cubana Saylí Navarro asistir incluso a un acto religioso.
La información salió a relucir en redes sociales a través de la cuenta personal de la también activista cubana Rosa María Payá.
A traves de esa plataforma, Payá escribió lo que se supone es el mensaje integro de Saylí Navarro, donde denuncia esta nueva intentona represiva de los vasallos de la dictadura.
“Nos prohibieron ir a misa. Fuimos interceptadas por el oficial Darío quien nos djo que no podíamos, y que yo tengo una medida de prisión domiciliaria”, establece el mensaje de Saylí Navarro.
SUCEDIENDO AHORA:
— Rosa María Payá A. (@RosaMariaPaya) September 8, 2021
“Nos prohibieron ir a misa. Fuimos interceptadas por el oficial Darío quien nos dijo que no podíamos. Y que yo tengo una medida de prisión domiciliaria#SOSPorLaVidaDeMiPadre” denuncia @SayliNavarro en el día 17 de huelga de hambre de su padre preso#SOSCuba #8S pic.twitter.com/RNC5R85LDC
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Este nuevo impedimento del régimen tanto a Saylí Navarro, llega días después de que la mujer recibiera amenazas de ser llevada a la cárcel si dejaba su domicilio, una situación verdaderamente cobarde por parte de la dictadura.
Es importante recordar que Saylí Navarro, hija del líder opositor Félix Navarro, no ha dejado de luchar para tratar de hacer justicia por su padre, detenido injustamente tras las históricas protestas en Cuba acontecidas el pasado 11 de julio.
Entretanto, cabe mencionar que hace más de tres semanas, padre e hija no tienen comunicación. El pasado 23 de agosto, Félix Navarro se declaró en huelga de hambre y, desde entonces, Saylí Navarro ha batallado sin descanso para conocer información de su progenitor, quien presenta un complicado estado de salud en la prisión de Combinado del Sur en Matanzas.
“No sabemos si está vivo o lo dejaron morir”, fueron las duras palabras de la activista cubana hace pocos días. Tras la lógica insistencia de la mujer en pedir información acerca de su padre, ahora el régimen pretende “amarrarla” de alguna manera al no permitirle salir de su propia casa, ni siquiera para hacer algo tan privado como rezar.
Redacción de Cubanos por el Mundo
