No es un giro a la rosca sino necesidad. La política que durante décadas asfixió, persiguió y satanizó al sector privado, ahora busca acogerle, celebrarle y reconocerle la labor, evidenciada durante la pandemia, cuando un dependiente sistema del turismo comenzó a resquebrajarse.
La preparación de un país para cualquiera, menos para sus propios ciudadanos, dejó en evidencia el rol preponderante del sector privado, no solo en Cuba, sino en cualquier economía sana. En un maltrecho esquema como el de la isla, cobra aún más importancia, considerando que el sector no estatal dio en los últimos meses inclusive empleo a trabajadores del Estado, según admitieron las autoridades locales.
Pero, lo que no puede olvidarse, es como hasta hace un par de años, etiquetaba, condenaba y repudiaba el régimen cubano, que ahora mira con vehemencia al “cuentapropismo”, como oportunidad de escape.
Bien dijo en el pasado el canciller del régimen, Bruno Rodríguez, después de la visita de Barack Obama a la isla, que el exmandatario viajó a “encandilar al sector no estatal, como si él no fuera el defensor de las grandes corporaciones sino el garante de los vendedores de perro calientes”.
Ahora, todo apunta a que son otros quienes – en sus propias palabras – pretenden encandilar al sector privado en Cuba. ¿Qué cambió tanto en el último año que hace que ahora el régimen aplauda y permita la importación de los no estatales? ¿Iluminó una nueva política económica al sistema comunista cuyos cuadros continúan siendo los que a golpe, balas y sangre asumieron el poder?
No es coincidencia que la “apertura” y el giro hacia el sector privado en Cuba, se produzca justo después de anuncios del gobierno de Estados Unidos para regular el envío de remesas y para arrebatar el total control que ejerce la bota militar sobre el dinero de los cubanos.
La nueva red de comercio mayorista en MLC tendrá ubicación en todas las provincias. Este mercado va dirigido a empresas 100 por ciento capital extranjero y empresas mixtas, así como al sector no estatal, refirió Héctor Oroza Presidente de @cimex_cuba #VamosPorMás pic.twitter.com/zXoPxWm7Nb— Radio Rebelde – Cuba (@radiorebeldecu) July 22, 2020
Tampoco es casual que esto ocurra cuando se incrementa la presión a través de sanciones contra altos funcionarios del régimen, señalados además de hechos de violación de derechos humanos, del delito de corrupción. Bien podría estar en la escena la proliferación de “nuevas” figuras “civiles”, de nuevos “emprendedores” que sirvan de fachada para continuar gestionando negocios de la dictadura o bien, ante las aspiraciones de avance del sector privado, la implementación de trabas burocráticas que le consigan, aguas abajo, una nueva tajada al poder militar.
RECOMENDADO: Sector privado en Cuba podrá exportar e importar productos, pero a través de una empresa castrista
Redacción Cubanos por el Mundo