El régimen de Cuba impuso un racionamiento en el consumo eléctrico a los negocios privados en la Isla, como medida de “ahorro” en este nuevo Periodo Especial.
Según detalla el diario digital 14yMedio, esto podría ser una nueva etapa en el racionamiento eléctrico, ya que en principio solo fueron las instituciones del Estado.
Sin embargo, la publicación destaca que dicha medida no será aplicada para los hoteles del Estado.
El dueño de un espacioso restaurante en el Vedado, tuvo que colocar ventiladores en las mesas para calmar el calor en los clientes.
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“Lo siento mucho pero me han puesto una cuota fija de gasto eléctrico y casi no puedo encender el aire acondicionado”, se disculpa.
Lourdes, una cubana que gestiona una casa para turistas con tres habitaciones en Centro Habana, indicó que ahora debe pedirle a los clientes, con mucha pena, que solo enciendan el aire “un ratico” y que se bañen con agua fría para “ahorrar” energía.
“Cada uno de los cuartos que alquilo tiene un minibar, un aire acondicionado de esos que la gente le dice split y un baño con ducha eléctrica para calentar el agua”, detalla. “Ahora le he tenido que pedir a los clientes que enciendan el aire un ratico nada más y que traten de bañarse con agua fría”.
Expresó que el ahorro es un pensamiento que todo ser humano debería tener con respecto a las necesidades que se le presenten pero paga “bien caro el consumo eléctrico para brindarle comodidad” a sus clientes.
“Es verdad que hay que ahorrar, siempre hay que ahorrar, pero es que yo pago bien caro el consumo eléctrico para poder brindarle comodidad a mis clientes y ahora van a tener que sufrir calor porque no puedo pasarme de un plan que me han dado que está muy por debajo de las necesidades de este negocio”, protesta.
El diario digital destaca que el servicio eléctrico en Cuba se paga 0,09 centavos de CUP por cada kilowatt.
Al superar los 100 y hasta 150 la tarifa se eleva a 0,30 y después de los 300 kilowatts consumidos se paga a 1,50 CUP cada uno.
Los altos consumidores, como pizzerías con hornos eléctricos, grandes restaurantes y hostales privados que superan los 5.000 kilowatts mensuales deben pagar los que consumen a partir de esa cifra a 5 CUP.
Otro propietario de una casa para turistas, indicó que mensualmente llega a pagar unos tres mil 500 CUP.
“Ahora, después de la reunión que tuvimos me han puesto un plan por el que no puedo superar los 2.500 y no sé cómo lo voy a hacer sin afectar el servicio”.
Eso aunado a que los cuentapropistas podrían perder sus licencias si pasan el consumo establecido.
Redacción Cubanos por el Mundo
